Diagfragma, el rey de la postura

Diafragma, el músculo Rey

“Un solo músculo con 600 compartimientos fasciales” Tony Myers.

Sea cual sea nuestro pensar clínico el Diafragma es una estructura diana que por sus correlaciones anatómicas, funciones e injerencias neurales, vegetativas y viscerales, debe ser siempre valorada extensivamente y tratada de forma específica en cada una de nuestra sesiones de tratamiento.

Por años se ha obviado lo lógico y se ha infra valorado el papel protagónico de este musculo “rey” que rige bajo su dominancia nuestras presiones intracavitarias; y por tanto comanda de forma directa e indirecta múltiples funciones vitales que garantizan nuestra supervivencia como especie (respiración, digestión, movilidad visceral, actitud bípeda, estabilidad lumbo-pélvica, circulación del plasma y de la linfa…). Por años el “Rey” fue descartado y olvidado por desconocerse muchos mecanismos de acción al cual se le atribuían alguna función; hoy la ciencia y la evidencia  han volcado de nuevo su mirada a quien nunca debió haber sido menos preciado y mucho menos olvidado.

Recuento Anatómico:

El diafragma es un músculo que se dispone en un plano anterior profundo y que adopta una forma comparada a un “paracaídas” o a una “medusa”. En su recorrido y expansión la porción carnosa de este músculo tapiza rodeando las superficies internas de los últimos 6 cartílagos costales formando dos cúpulas (izquierda y derecha) que se unen por detrás del apéndice xifoides del esternón (centro frénico)  y toma punto de inserción fijo bajo una porción fibrosa denominada Tendón Central (pilares diafragmáticos) en L2 y L3.

Topográficamente, el diafragma separa nuestra cavidad torácica de la abdominal; por tanto mantiene una estrecha comunicación fascial por arriba con la pleura, pulmón, corazón. Y por debajo con ciertas vísceras abdominales como el hígado, estomago, bazo, duodeno, colon transverso)

El diafragma es el musculo respiratorio primario por excelencia; en condiciones normales, más del 60% de la capacidad respiratoria de una persona es mediada sólo por su acción y será asistida por otra musculatura inspiratoria accesoria como: a) serrato mayor, b) pectoral menor, c) escalenos, d) esternocleidooccipitomastoide. Su acción voluntaria está subordinada neuralmente bajo nervios motores que emergen de las raíces anteriores de C3 a C5 (N. Frénico) y de forma autónoma e involuntaria bajo el comando del insigne N. Vago (fibras ortosimpáticas).

Histológicamente, la mayor proporción de sus fibras son de contracción lenta (tónicas); por tanto y según la fisiopatología de Souchard (enfoque RPG), es un musculo que tenderá a la retracción.

Mecanismo de Acción del Diafragma:

La contracción del diafragma durante la inspiración, asemeja la función de un pistón; cuando este se contrae, los pilares diafragmáticos tiran hacia abajo las cúpulas,  acercando los puntos de inserción y obligando a que el diafragma descienda; con ello, la porción carnosa se aplana obligando a las vísceras abdominales a deslizar entre sus bolsas serosas para descender y permitir así que la cavidad torácica aumente de diámetro  (en sus 3 ejes)  haciendo posible el llenado de los pulmones.

La acción continuada del diafragma (ascenso/descenso) controla y regula más allá de la respiración, diversos procesos fisiológicos; entre ellos: el mantenimiento de las presiones intracavitarias del tórax y del abdomen; acción que resulta vital y prioritaria si se quiere que en el cuerpo reine la homeostasis y exista como consecuencia de ello una postura eficiente.

Otras relaciones del Diafragma:

El diafragma como ya se menciono es un musculo que tapiza y divide nuestra cavidad torácica de la abdominal para ejercer recíprocamente una fluctuación de presiones que le economiza al cuerpo energía para realizar ciertas tareas fisiológicas (respiración, circulación, digestión…); aunque el diafragma separa ambas cavidades, es perforado por 3 grandes tuberías (hiatos) que permiten la comunicación entre el mundo torácico y el abdominal para dar así continuidad al fluyo de toda la red líquida de nuestro organismo.

En el contexto cardiovascular, el diafragma es perforado por la gran Aorta que continúa su recorrido descendente hacia el abdomen (aorta abdominal) y miembros inferiores. Igualmente pero en un recorrido ascendente, la vena cava inferior continua su recorrido hacia el corazón atravesando el diafragma.

El bolo alimenticio después de la deglución desciende por el esófago, este atraviesa el diafragma y a través del cardias da continuidad con el estómago para hacer posible el proceso de digestión.

El N. Vago, aunque “teóricamente” no perfora al diafragma, si usa al esófago como medio de comunicación para llegar a la cavidad abdominal, formar el plexo solar y dar así inervación ortosimpatica a casi la totalidad de vísceras abdominales.

Pensar en estas relaciones anatómicas importantes y vitales (arteria y vena) de alto calibre; nos invita a pensar en la necesidad de velar porque exista antes de cualquier otro planteamiento terapéutico un diafragma realmente “sano” y funcional. Una alteración de este (espasmo/hipertonía), puede estar comprometiendo el diámetro de estas tuberías (vena, arteria, esófago) y estar impidiendo que la red liquida (plasma, nutrientes, toxinas, linfa) transcurra con total libertad (Ley de la Arteria). De igual forma, cualquier disfunción que presente el diafragma, puede repercutir de forma directa (movilidad visceral) e indirecta (N. Vago, Aorta Abdominal) en la función de nuestro sistema entérico.

Otras relaciones del Diafragma:

Hablando desde un contexto de Globalidad y regido bajo los principios de Tensegridad; el Diafragma por su ubicación, función e infinitas conexiones fasciales, influye mecánicamente en la ejecución de cualquier patrón motor del  aparato locomotor.

Sabemos que el movimiento periférico (miembros superior/inferior), está subordinado en situaciones normales bajo la pre-activación y control del sistema abdominal; El diafragma forma parte del núcleo interno profundo y por tanto juega un papel estabilizador de todo el complejo dorso-lumbo-pélvico gracias a su trabajo sinérgico con quienes comparte inserción fascial.

La línea frontal profunda (meridianos fasciales de Tony Myers), traza una línea tridimensional desde el pie al cráneo, que nos invita a pensar como el diafragma asiste tensionalmente a otras estructuras para ejercer puntos eficientes de tensión y así asegurar la estabilidad durante la respiración, la actitud bípeda o un movimiento concreto. Vemos como de forma directa hay anclajes fasciales que interconecta diafragma-psoas/iliaco, diafragma-cuadrado lumbar, diafragma- transverso abdominal…  Y así muchos más; de forma que la acción aislada de uno y otro, ejerce por tracción del componente fascial injerencia en su homólogo.

 

Cuando realizamos una evaluación y tratamiento basados en “Globalidad”; debemos recordar como el Diafragma se sirve como punto de conexión al núcleo de estabilización y a las periferias; por tanto, sea cual sea el caso al que nos presentemos clínicamente, debemos valorar SIEMPRE el estado tónico y la capacidad funcional del Diafragma de quien nos consulte.

Un diafragma en disfunción (espasmo/hipertonía), va a influir mecánicamente en la expansión torácica necesaria para un adecuado patrón respiratorio (ext dorsal + apertura de costillas); la charnela dorso-lumbar, constituye el centro de rotación del cuerpo, por tanto todos los movimientos dentro del plano transversal necesitaran de un diafragma completamente funcional capaz de ejercer dos acciones prioritarias:

  1. Que sea extensible y por tanto no fije la movilidad dorso-lumbar en ningún rango de movilidad
  2. Que el diafragma conjuntamente con el Transverso Abdominal (TVA) regule la presión abdominal venciendo la compresión ejercida por la fuerza de gravedad (aumentar espacio intervertebral = favorecer movilidad del raquis).

Sí… En términos de “globalidad” no es de locos pensar que una cefalea puede originarse o perpetuarse por un diafragma en disfunción; o que un esguince de tobillo pudo (más allá de los factores externos) producirse por un diafragma en disfunción que asistía en estabilidad al tren inferior.

Postura y Diafragma:

Postura y Diafragma, Postura y Respiración. Ambas acciones/funciones están relacionadas y son interdependientes unas de las otras; no existe la posibilidad de mantener una postura eficiente mientras exista un diafragma que no opere de forma idónea; del mismo modo, una postura mal adaptada, someterá al diafragma a un acortamiento crónico que evitará que este pueda expandirse en toda su totalidad.

Muchos organismos en este planeta dependen de la Respiración para sobrevivir al entorno. Durante la respiración, nuestros alveolos pulmonares captan moléculas de oxigeno (O2) que nuestro cuerpo usará como elemento vital para producir energía y poder así proveer a nuestras células de ATP para que estas cumplan de forma continuada con miles de procesos fisiológicos que garantizarán que exista un estado de función y por tanto de salud óptimos.

Naturalmente, una buena postura promueve de forma consecuente una respiración adecuada; mientras que la pérdida de esta, alterará la relación longitud/tensión de nuestros músculos respiratorios haciendo más “costoso” en términos de eficiencia/energía que nuestro cuerpo ejecute un adecuado patrón respiración adecuada.

La “Postura” como término, hace referencia a la disposición de nuestros distintos segmentos estructurales en el espacio; esta viene influenciada por diferentes variables (genética, estado psico-emocional, respuesta al stress, hábitos/dominancia) y por la efectiva respuesta tensil del sistema musculo-fascial hacia una fuerza externa que constantemente está ejerciendo sobre nosotros una fuerza de compresión hacia el suelo:

Fuerza de gravedad

“Una postura estructuralmente deficiente es aquella que no tiene una base estable de apoyo desde la cual operar. Un cuerpo sin soporte, en términos de estabilidad intrínseca del CORE probablemente será endeble e incapaz de integrar estructuralmente la eficiencia en movimiento funcional realista” N. Aguilar. Cuando el cuerpo opera regido por una estructura inestable e ineficiente (postura mal-adaptativa), los músculos pierden su relación longitud/tensión (tensegridad) que les permitiría mantener anclajes de tensión idóneos para operar de forma eficiente y favorecer desde su acción sinérgica la estabilidad de nuestro centro y miembros.

 

¿Existe una Postura Ideal?

Esta respuesta sigue siendo hoy día un gran debate. Incluso los libros de anatomía antiguos y actuales se contradicen en cuanto a la conformación morfológica de nuestro cuerpo y a si nuestra columna realmente presentaba en un pasado curvas “fisiológicas”. Desde un punto de vista evolutivo, nuestra especie por millones de año ha evolucionado y seguirá haciéndolo para adaptarse al entorno; nuestro ritmo evolutivo ha sido lento y progresivo: de simples bacterias pasamos hoy a ser los seres grandes y complejos que nos conforman. Hoy el ritmo de vida evoluciona a un ritmo feroz; la vida que conocieron nuestros abuelos es totalmente distinta a la realidad de nuestro presente inmerso en cientos de “avances” tecnológicos.

En fin, mi punto es que a esta respuesta compleja debemos mantener a mi criterio cierto grado de “flexibilidad”; ya que en estos campos debemos mantener una criterio neutral e individual. No podemos generalizar con reglas y cuantificar con grados (curvaturas) aquello que debe ser “ideal”; cada persona es dueña de una realidad, de un contexto y se desenvuelve en un entorno que refleja la conducta de su cuerpo en el espacio (Postura); En este mundo apasionante existen reglas “generales” que debemos aplicar buscando la eficiencia individual.

  • Postura Vs Fuerza de Gravedad: Una eterna Batalla.

Kuchera (1997) responde a esta pregunta de la siguiente forma: “la postura optima es el balance de la configuración del cuerpo con respecto a la gravedad”.

-Fuerza de Gravedad = Compresión del Raquis.
-Postura Eficiente = Balance de Presiones Intracavitarias = Descompresión

De forma clásica, hablamos de postura y sólo hablamos del papel que ejerce la cadena muscular posterior o “antigravitatoria” y de cómo esta mantiene un tono tónico constante para evitar nuestro desplome; considerar que esta cadena de forma aislada garantiza nuestra actitud bípeda es un pensamiento vago e insuficiente; casi por igual que emplear algún corset dorsal para combatir la “debilidad de la cadena posterior” para combatir una hipercifosis.

Es simple: la fuerza de gravedad ejerce sobre nosotros una fuerza vertical de compresión que se trasmite sobre nuestro raquis; esta fuerza nos empuja contra el suelo constantemente  y somete a un stress continuo a todo nuestro complejo osteo-articular. Si mis 3 pilares (Transverso Abdominal, Diafragma y Suelo Pélvico) no están en concordancia y generan por tanto una presión intraabdominal adecuada, mi cuerpo será incapaz de contrarrestar el efecto gravitatorio y por tanto dará lugar al desequilbrio con la adopción de  una postura mal adaptativa compensatoria.

El cuerpo en contextos “posturales” opera siempre bajo tres reglas básicas:

a) Equilibrio

b) Economía 

c) Confort.

Nuestro organismo es sabio, y a expensas de saber que necesita ahorrar toda la energía posible para emplearla en situaciones de emergencia o en otros procesos fisiológicos vitales, adapta nuestra postura no a lo eficiente, sino a lo económico energéticamente hablando. La compresión gana la batalla, el cuerpo se desploma anteriormente y como consecuencia de ello el Diafragma principalmente presentará casi siempre una importante fijación fascial; el diafragma no puede expandirse de forma económica y confortable y como respuesta a ello (ya que no podemos dejar de respirar) nuestro cuerpo adopta otro mecanismo respiratorio accesorios (Respiración Apical).

 

Conclusiones

El Diafragma es un musculo rey al que debes volcar tu atención SIEMPRE. Da igual a lo que te enfrentes; por todas sus implicaciones (nerviosas, vasculares, viscerales, mecánicas…) es un target terapéutico que debes valorar y tratar para poder realmente incidir en reequilibrar la homeostasis corporal.

La Postura es el resultado de la lucha constante de nuestro sistema musculo-esquelético vs la fuerza de la gravedad.

La integridad de mis 3 pilares (Diafragma, Transverso Abdominal y Suelo Pélvico, permitirá que nuestras cavidades posean presiones internas idóneas para contrarrestar la compresión.

Un tratamiento completo del Diafragma debe incluir 3 tipos de ramas de alcance:

  1. Tto Estructural à debemos valorar la integridad de todos los puntos óseos que sirven de inserción: charnela toraco-lumbar, L1-L3, T6-T12, Ultimas 6 costillas, esternón, C3-C5 (N. Frénico)…
    Tto Craneal à El nervio vago (X) desciende del cráneo, perfora el agujero rasgado posterior y da inervación ortosimpatica al diafragma y a casi todas las vísceras abdominales (plexo solar).
  2. Tto Visceral à el Diafragma tiene conexión fascial directa con las bolsas serosas (superficie de deslizamiento visceral) del hígado, estomago, pulmón, pleura).
  3. Sólo en libros existe la descripción de un patrón postural “idóneo”.
  4. En contextos prácticos estas ideas pueden dar luz, pero la individualidad personal se superpone a cualquier dato bibliográfico. Es así como debemos considerar todos y cada uno de los factores personales que rijen la vida de esa persona para así trabajar en reequilibrar las estructuras de sostén y lograr bajo diferentes metodologías terapéuticas la integración estrucutral, y con ello: que esa persona sea consciente de recuperar y mantener su postura eficiente.
  • Hablar de este musculo Rey podría seguir tomándome líneas y líneas de contenido… Es un musculo vital y que participa en tantos procesos fisiológicos  que nunca acabaríamos la discusión. Si llegaste hasta acá quiero agradecer tu tiempo!! Y me gustaría que me dejaras reflexiones, criticas o dudas para siguientes artículos.

“Posture follow movement like a shadow” Sherrington (1931).

If breathing is not normalised, no other movement can be” Karel Lewit

“La postura sigue al movimiento como una sombra”

“Si la respiración no es normalizada, ningún otro movimiento puede serlo”

Bibliografía

Myers T. (2014). Anatomy Trains. Editorial Elsiever

Francois R (2017). Osteopatia Basada en la Evidencia. Editorial Medos

Aguilar N. (2013). El Poder de la Postura

Chaitow L y otros (2016). Recognizing and treating breathing disorders. Editorial Elsiever

Blandine C (2014). Anatomy of breathing.

Autor: Jesus Rodriguez, Fisioterapeuta.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *